En los últimos tiempos, los negocios online son más populares que nunca. Además, cada vez más empresas, tanto digitales como físicas, están interactuando con sus clientes online y creando seguidores. Eso significa una cosa: el contenido de calidad es ahora más importante que nunca.
Es posible que tengas una web para tu negocio o una tienda online/ecommerce, y te hayas estado preguntando si necesitas un copywriter (redactor publicitario) o un content writer (redactor de contenido). Es una pregunta que todos los dueños de negocios nos hacemos alguna vez. La respuesta simple es que no debes elegir a uno de los dos, si no que los necesitas a ambos. ¿Qué tiene cada uno de ellos que te hace necesitar a ambos?
¿Cuál es la diferencia entre un redactor publicitario y un redactor de contenido?
Veamos la diferencia entre redacción publicitaria y redacción de contenido.
El copywriting (la redacción publicitaria), en esencia, es la redacción destinada a vender. Ya sea un producto o un servicio que ofreces a tus clientes, la redacción publicitaria te ayudará a venderlo. Por el contrario, el content writing (la redacción de contenidos) está destinada a informar. Esto puede ser en forma de artículos, publicaciones de blog o publicaciones en redes sociales, todo con el objetivo de proporcionar contenido valioso.
Los redactores publicitarios tienen un conjunto de habilidades muy diferente al de los redactores de contenido. En gran medida, utilizan la psicología, la estrategia de marketing y los principios publicitarios en sus escritos. Un copywriter redactará en un lenguaje que sea persuasivo, atractivo y que cree una conexión entre una empresa y sus clientes potenciales. Por lo general, crean piezas más breves que se centran en la publicidad, la construcción de la marca de una empresa y la creación de conciencia sobre un producto o servicio.
Los redactores de contenido escriben contenido de formato más largo, como publicaciones de blogs y artículos. El propósito de este contenido es informar a los clientes de una empresa. Las publicaciones y los artículos de blogs ofrecen una gran cantidad de detalles sobre un producto o servicio y crean conciencia sobre la oferta de una empresa.
Es cierto que tanto la escritura de contenido o como los textos destinados a vender pueden tener propósitos similares y eso puede difuminar las líneas entre los dos, pero es útil tener siempre presente la diferencia fundamental. La redacción publicitaria vende y la redacción de contenidos informa. Teniendo esto en cuenta, la distinción es obvia.
¿Por qué necesitas un redactor publicitario y un redactor de contenido para tu negocio?
De lo anterior, puedes ver que los redactores publicitarios y los redactores de contenido tienen diferentes propósitos. Significan cosas diferentes para tu negocio. No utilizarías a un programador en lugar de a un contable para que llevara tus libros de contabilidad, ¿verdad? Cada uno está formado y capacitado para realizar una tarea específica.
Sí, el objetivo es vender tu producto o servicio a tus clientes potenciales. Deseas crear una marca y conciencia en torno a tu producto porque de ahí provienen las ventas. Cuanto más conocimiento tengan los posibles clientes sobre tu oferta, más venderás. Aquí es donde los redactores publicitarios pueden ser de un valor incalculable. La cuestión es que los clientes no siempre quieren que les vendan. Por lo tanto, no siempre debes querer vender a tus clientes.
Los clientes también quieren estar informados. Necesitan tener disponible y conocer toda la información sobre tus productos y servicios incluso cuando no quieren comprar. La mayoría de las veces, ese cliente potencial se convertirá en un cliente real cuando necesite un producto y recuerde el contenido que proporcionó tu empresa. Así mismo, los clientes existentes deben nutrirse con contenido. Esto mantiene las relaciones vivas y los convertirá en clientes recurrentes.
En resumen, necesitas tanto un copywriter como un content writer y contenido. No uno u otro, no son mutuamente excluyentes, cada uno realiza una tarea esencial en la creación de tu marca, aunque cada uno a su manera. Si encuentras una persona que haga ambos y lo haga bien, te habrá tocado la lotería. Cuídalo/a.